Nacido en una familia pobre del interior de Rio Grande do Sul, Leonel de Moura Brizola se convirtió en uno de los líderes políticos más destacados de Brasil del siglo XX. Expresando una versión más radical del laborismo de Getúlio Vargas, se aproximó a los movimientos sociales, a las reformas de base y a una perspectiva socialista.
Huérfano de padre desde la infancia, concluyó los estudios primarios gracias a la ayuda que recibió de la Iglesia. Entonces se trasladó a Porto Alegre, donde tuvo diversos trabajos de baja remuneración, pero consiguió terminar los estudios superiores y obtener, primero, el título de técnico rural, y luego, a los 27 años, el de ingeniero. En 1945 ingresó, con sus compañeros sindicalistas, al primer núcleo del Partido Laborista Brasileño (PTB, Partido Trabalhista Brasileiro) regional. En 1947 fue elegido diputado por el estado de Rio Grande do Sul, y en 1950 se casó con Neusa Goulart, hermana de João Goulart. Getúlio Vargas fue su padrino de bodas.
En 1952 fue nombrado Secretario de Obras de Rio Grande do Sul, y en 1954 fue elegido diputado federal. Desde su cargo de alcalde de Porto Alegre, en 1955, priorizó la educación popular, la salud general y el transporte público, y gobernó con un amplio apoyo de la población que lo eligió gobernador de Rio Grande do Sul en 1958, con un 55% de los votos.
Una vez en el gobierno, articuló la crítica al modelo político-económico dependiente implantado por Juscelino Kubitschek con la puesta en práctica de un plan de desarrollo industrial fundado en la alianza de los trabajadores, el Estado y el empresariado nacional volcado al mercado interno. Durante su gestión creó la Caja Económica Estatal y conquistó el control accionario del Banco de Rio Grande do Sul. Promovió el desarrollo de los sectores productivos: creó la empresa mixta Aços Finos Piratini, articuló la instalación de la Refinería de Petróleo Alberto Pasqualini y estatizó la Companhia Riograndense de Telecomunicações (CRT), subsidiaria de la estadounidense International Telephone and Telegraph (ITT), y la Companhia de Energia Elétrica Riograndense, filial de la American and Foreign Power Company.
En 1961, con la renuncia de Jânio Quadros, organizó el movimiento de resistencia al veto de los ministros militares a la toma de posesión del vicepresidente laborista João Goulart, o Jango. Montó la “cadena de legalidad”, y por intermedio de Radio Guaíba llamó a la población a resistir el intento de obstaculizar la candidatura de Jango. La acción penetró de tal modo en los medios militares, particularmente en el III Ejército, que sus comandantes, entonces vacilantes, adhirieron a la resistencia, poniendo fin al golpe y a las tentativas de bombardear el Palacio Piratini, desde el cual Brizola comandaba las movilizaciones.
En 1962 fue elegido diputado federal por Río de Janeiro, con la mayor proporción de votos de la historia de Brasil. Articuló el Frente de Movilización Popular, integrado por sindicalistas, estudiantes, militares nacionalistas y parlamentarios unidos para impulsar las reformas de base, principalmente: la reforma agraria, medidas relativas al impuesto a las ganancias, el combate a la especulación inmobiliaria y la reforma universitaria.
Convocó a la población a organizarse en grupos de once para defender las reformas y, en el mitin de la Central de Brasil del 13 de marzo de 1964, dio un discurso clamando por la disolución del Congreso, que veía como reaccionario y golpista, ya que había apoyado el veto a Jango en 1961 y se resistía a las reformas. Defendió la convocatoria a una asamblea constituyente de operarios, campesinos, vigilantes y hombres de trabajos auténticamente populares. Ante el golpe militar de 1964 movilizó nuevamente al III Ejército pero Jango descartó la resistencia desmontando el llamamiento legalista en la oficialidad.
Durante el período de exilio estuvo en Uruguay, Estados Unidos y Portugal. Volvió a Brasil en 1979 para refundar el PTB, pero sus derechos sobre la fórmula le fueron negados por el último gobierno de la dictadura, que entregó el nombre a Ivete Vargas. Entonces fundó el Partido Democrático Laborista (PDT, Partido Democrático Trabalhista), con el que intensificó la crítica al modelo dependiente y asociado, atribuyendo los males de la sociedad brasileña a las pérdidas internacionales impuestas por el capital extranjero.
Cuando fue candidato a presidente de la República, en 1989, en los estados que había gobernado recibió: en Río de Janeiro el 50,5% de los votos y en Rio Grande do Sul, el 60,9%. Perdió ante Luiz Inácio Lula da Silva, por el 0,5% de la votación nacional, el derecho a disputar con Fernando Collor de Mello la segunda vuelta electoral (en São Paulo obtuvo el apoyo de apenas el 1,4% del electorado local). Entonces apoyó a Lula, aunque no se alejó tampoco de Collor en su segunda gestión en el gobierno de Río de Janeiro. A cambio de esa aproximación, que colaboró en el desgaste de su gobierno, logró construir la Linha Vermelha, una importante obra caminera en los suburbios de Río.
Combatió sistemáticamente las privatizaciones del período Fernando Henrique Cardoso (1995-2002). Si bien fracasó en los nuevos intentos electorales, jamás dejó de ser una voz influyente en las grandes articulaciones políticas. Fue candidato a la vicepresidencia con Lula en las elecciones de 1998. Último político laborista del ciclo nacionalista brasileño, murió de un infarto en Río de Janeiro, no sin antes comenzar a criticar la política económica de Lula, a quien el PDT había apoyado en 2002.