Ingresó a los dieciséis años a la Universidad de Chile (UC), donde se graduó en derecho, defendiendo la tesis “La concentración del poder económico”. La obra, que realiza un estudio sobre las familias ricas chilenas, alcanzó gran éxito editorial. Ricardo Froilán Lagos Escobar conquistó una beca de estudios para hacer el doctorado en economía en la Universidad de Duke, en los Estados Unidos, entre 1960 y 1962. De vuelta a su país, asumió el cargo de profesor del Instituto de Economía de la UC, donde más tarde fue el secretario general.
En 1972, el presidente Salvador Allende lo señaló para el puesto de embajador en Moscú, pero el Congreso poco favorable, y el golpe militar del 11 de septiembre de 1973 no permitieron su asunción. Huyendo de la represión, Lagos se exilió en la Argentina, donde trabajó como secretario general de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) y del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso). Posteriormente se mudó a los Estados Unidos, donde dio clases en la Universidad de Carolina del Norte y sirvió como economista de las Naciones Unidas.
Regresó en 1978 a Chile, donde trabajó en el Programa Regional de Empleo de las Naciones Unidas (Prealc). Durante los años 80 fue uno de los líderes del Partido Socialista y presidió la Alianza Democrática creada en 1983, que agrupaba a la mayoría de los partidos contrarios al régimen militar. El 7 de septiembre de 1986 fue detenido e interrogado sobre el atentado a Augusto Pinochet, ocurrido ese mismo día. Fue liberado luego de diecinueve días, contando con la ayuda de una campaña internacional.
Más tarde, Lagos se enrolaría en la campaña por el “NO”, gracias a la cual recorrió el país defendiendo la no continuidad del régimen militar; causa que resultó victoriosa en el plebiscito de 1988. Aun habiendo conquistado gran notoriedad con la campaña, apoyó a Patricio Aylwin Azócar como candidato presidencial por la Concertación de Partidos por la Democracia. Después de la victoria, asumió el Ministerio de Educación, desde donde implementó una reforma de descentralización educativa. En las elecciones de 1993 apoyó al candidato de la alianza de centroizquierda, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, en cuyo gobierno asumió el Ministerio de Obras Públicas.
En 1999, Lagos inició su campaña para la presidencia. Su principal oponente, el derechista Joaquín José Lavín Infante, de la Unión Democrática Independiente, lanzó una fuerte campaña, desvinculándose de la figura autoritaria de Pinochet y despolitizando el debate, lo que garantizó la convergencia de la derecha y una alta votación para esa corriente. La decisión fue a segunda vuelta, en la que Lagos venció el 16 de enero de 2000, con el 51,31% de los votos. Asumió el día 11 de marzo, siendo el primer presidente electo por la
Concertación que no estaba ligado a la Democracia Cristiana, pero sí al bloque de centroizquierda: Partido Socialista, Partido Radical Social Demócrata y Partido por la Democracia, del cual también era militante.
Su mandato fue duramente criticado por la izquierda por dar continuidad a las políticas de privatizaciones, concesiones de servicios públicos, firma de tratados de libre comercio con los Estados Unidos, la Unión Europea y otros países, y por la lentitud en juzgar a los militares que cometieron violaciones a los derechos humanos. Aun así, eligió en 2006 a su sucesora, Michelle Bachelet.