Sobre la grama sorprendió al público y a la crítica nicaragüenses, a comienzos de los años 70, por hacer del erotismo un movimiento revolucionario para la liberación del cuerpo y de los instintos y por continuar la renovación poética llevada a cabo por Ernesto Cardenal y Claribel Alegría. Consciente de la condición femenina, la obra poética de Gioconda Belli y luego su narrativa revelaron su preocupación por los problemas sociales y políticos latinoamericanos (Línea de fuego, 1978).
Junto con otros intelectuales, Gioconda Belli integró las filas del movimiento sandinista de 1970 a 1994. Perseguida por la dictadura militar de Anastasio Somoza, se exilió en México y en Costa Rica. Retornó con el triunfo revolucionario y ocupó varios cargos públicos. En 1988 publicó la novela política La mujer habitada, éxito editorial que la proyectó al lado de otros importantes escritores, como Ernesto Sabato. Fue madre de cuatro hijos. En El país bajo mi piel (2001) rememoró las innumerables convulsiones sociales nicaragüenses. Otra obra: Sofía de los presagios (1990).