Anguila

Bajo el liderazgo de James Ronald Webster, actual héroe nacional, los anguilenses aprovecharon el momento de cambios y, el 30 de mayo, expulsaron a las fuerzas policiales de Saint Kitts que se mantenían en la isla. La estrategia a favor de la separación también contó con un referendo realizado el 11 de julio, en el cual 1813 personas votaron por la separación y solamente 5 lo hicieron en contra.

La inestabilidad política provocó la intervención de la metrópoli. En el mes de diciembre de 1967 Gran Bretaña logró firmar un acuerdo provisorio con los líderes revolucionarios y designó a Anthony Lee para que trabajara con Webster en pro de la pacificación de los lazos entre Anguila y Saint Kitts. Sin embargo, el 8 de enero de 1969, cuando finalizó el plazo para el acuerdo provisorio, las relaciones entre las dos islas aún no estaban normalizadas. El 6 de febrero se realizó un nuevo referendo. Esta vez 1739 anguilenses votaron a favor de la separación y sólo hubo 4 votos en contra.

Soldados británicos en Anguila, 1969 (Reproducción /Mike Gore/www.hmsminerva.info)

El 11 de marzo Gran Bretaña envió a otro representante, William Whitlock, con el objetivo de crear un gobierno interino bajo el dominio británico, pero no fue aceptado. Ante esta circunstancia, la metrópoli decidió invadir la isla. El 19 de marzo dos fragatas, HMS Minerva y HMS Rothesay, llegaron a las costas de Anguila con más de trescientos hombres para “restablecer el orden”. La población recibió bien al regimiento británico. Muchos aluden a este episodio como “Bahía de Cochinillos”, una ironía relacionada con la frustrada invasión de la Bahía de Cochinos, en Cuba, que en 1961 emprendieron anticastristas organizados por la CIA.

El enviado británico Anthony Lee volvió al lugar para formar parte de una nueva administración. La revolución había sido un éxito. Un acuerdo interino permitió proclamar una nueva Constitución, el 12 de febrero de 1976. Finalmente el 19 de diciembre de 1980 tuvo lugar la separación definitiva de Saint Kitts y Nevis –que permanecieron unidas– y Anguila pasó a ser un Estado asociado a la comunidad británica.

Colonización y estancamiento económico

Para los anguilenses la victoria del colonialismo fue también la de la autodeterminación. Hasta aquel momento ellos creían que el mantenimiento del vínculo con Saint Kitts les impedía desarrollarse.

Al igual que en otras islas caribeñas, la colonización en Anguila fue iniciada por los ingleses a mediados del siglo XVII. Lo que ellos deseaban era desarrollar la agricultura para luego exportarla. Sin embargo, las condiciones climáticas y los suelos menos favorables que en las demás colonias cercanas hicieron fracasar el cultivo de la caña de azúcar, el algodón y el tabaco. Cuando en el año 1838 se abolió la esclavitud, la población de Anguila no superaba los 2.000 habitantes. En aquella época, muchos ingleses blancos decidieron regresar a la metrópoli y vendieron sus tierras a los antiguos esclavos. Fueron estos nuevos agricultores independientes quienes expandieron la producción agrícola al resto de la isla.

A pesar del estancamiento económico, la Corona inglesa debió enfrentar varias embestidas de Francia contra la isla. Alrededor de 1666, pocos años después de la llegada de los primeros colonizadores ingleses, las fuerzas francesas invadieron Anguila y, así, escribieron un nuevo capítulo sobre la disputa de las dos metrópolis por el control del Caribe. El Tratado de Breda de 1667 colocó nuevamente a la isla bajo el yugo británico. A partir de una reforma administrativa realizada por Gran Bretaña en su colonia en el año 1824, Anguila quedó vinculada a Saint Kitts, isla cercana de mayor extensión física y poderío político. A los anguilenses no les gustó el cambio.

Según ellos, hubo una pérdida relativa de su autonomía dado que no notaban que los administradores vecinos mostraran interés por invertir en el desarrollo local. Ése fue el comienzo del descontento que duraría hasta el siglo siguiente y solamente sería resuelto con la separación definitiva.

Forma de gobierno

Con la Constitución de 1976 y la secesión en el año 1980, se consolidó el sistema de gobierno de Webminster en el territorio. El jefe de Estado fue designado por la realeza de Gran Bretaña. En elecciones libres resultaron electos siete de los doce representantes de la Asamblea Legislativa y el líder del partido o de la coalición vencedora se convirtió en ministro jefe.

En las elecciones de 1976, el Partido Progresista del Pueblo (PPP, People’s Progressive Party), logró adquirir seis de las siete bancas para diputados y Ronald Webster pasó a ser el ministro jefe. Pero su gobierno duró poco, sólo hasta febrero de 1977, cuando la Asamblea aprobó un voto de desconfianza. El estilo centralizador de Webster desagradaba incluso a sus colegas. La representación británica en la isla decidió entonces designar a Emile Gumbs, de la Alianza Nacional de Anguila (ANA, Anguilla National Alliance) para el cargo de ministro jefe. Gobernó hasta 1980, cuando fue derrotado nuevamente por Webster, quien poco tiempo después fundó un nuevo partido: el Movimiento Unido de Anguila (AUM, Anguilla United Movement).

La disputa continuó y, en 1984, Emile Gumbs consiguió volver al poder. Gobernó hasta 1994, el momento de su retiro. Ese año salieron ganadores en las elecciones el Partido Demócrata de Anguila (ADP, Anguilla Democratic Party) y el Partido Anguila Unida (AUP, Anguilla United Party), que designaron a Hubert Hughes como jefe de gobierno. En el año 2000, los demócratas pactaron un acuerdo con la ANA para crear el Frente Unido de Anguila (AUF), y resultaron victoriosos. Osbourne Fleming fue designado ministro jefe. En las elecciones de febrero de 2005, su grupo, nuevamente ganador, lo mantuvo en el cargo. En 2010, Hubert Hughes fue designado una vez más para la jefatura de gobierno, cargo que seguía ocupando en 2015.

Vista de Cala Anguila (Steffen Löwe/Wikimedia Commons)

La playa de Cap Juluca, con sus típicas aguas transparentes (tiarescott/Wikimedia Commons)

 

Mapas