Agrupación política fundamental para la historia de Costa Rica en el siglo XX, el PLN nació en el seno del movimiento estudiantil de los años 30 y, posteriormente, de una disidencia del Partido Socialdemócrata (PSD), del cual era miembro José Figueres Ferrer. En 1948, Figueres Ferrer lideró la victoria del Ejército de Liberación Nacional en la corta y decisiva guerra civil que experimentó el país y que se había desencadenado luego de una victoria electoral del PSD, seguida de acusaciones de fraude.
Finalizado el conflicto se formó una coalición liderada por los militantes del Movimiento de Liberación Nacional, que resultaría en la formalización del Partido Liberación Nacional, el 12 de octubre de 1951. Desde aquel entonces, el PLN ha sido uno de los protagonistas de la vida política costarricense y ha ganado las elecciones en forma recurrente, contribuyendo esencialmente con la consolidación de la estructura institucional nacional.
Los primeros gobiernos del partido aplicaron políticas nacionalistas, con estatización de los bancos y nacionalización del sistema ferroviario y de los hospitales. Sin embargo, a partir de los años 90 y bajo la presión de los organismos financieros internacionales, hicieron un giro hacia la derecha y comenzaron a ejecutar programas neoliberales. Entre sus filas militaron personalidades como Figueres Ferrer, que participó de la junta de gobierno tras la guerra de 1948 y resultó electo presidente dos veces; Óscar Arias Sánchez, Premio Nobel de la Paz y presidente electo por segunda vez en 2006, y los ex presidentes Francisco José Orlich Bolmarcich, Daniel Oduber Quirós, Luis Alberto Monge Álvarez y José María Figueres Olsen.
En 2010, Laura Chinchilla, del partido, venció las elecciones y se tornó la primera mujer en asumir la presidencia de Costa Rica. Su gobierno sufrió gran rechazo y fue blanco de seguidas acusaciones de corrupción. La presidenta se opuso a las propuestas de alteración de la Carta, que tenían como objetivo separar la iglesia y Estado. La Constitución define el país como católico romano. Chinchilla llamó la atención de los líderes de los derechos humanos cuando se manifestó contraria a la venta de contraceptivos de emergencia y apoyó la Marcha por la Vida y la Familia. Ella no consiguió hacer su sucesor en las elecciones de 2014, vencidas por Luis Guillermo Solís, del Partido de Acción Ciudadana (PAC).