Autora de novelas, poesías y ensayos que cuentan el “mundo perdido” tradicional puertorriqueño –sometido a la política estadounidense– y que dialogan con la historia de las sociedades caribeñas. Explica su perspectiva “andrógina” de la literatura a partir de la búsqueda del valor intrínseco de la obra más allá del sexo del autor. Su feminismo adquiere amplios contornos sociales, siguiendo el camino de las escritoras Ana María Rodas –primera periodista mujer de Guatemala–, y Patrícia Galvão, Pagu –activista política brasileña–, porque entiende que la condición de la mujer es consecuencia de las estructuras desiguales de poder.
Lanzó en 1972 la revista vanguardista Zona Carga y Descarga, que divulgaba autores no canónicos. Su primer libro de cuentos, Papeles de Pandora (1976), le creó fama de anarquista, pornográfica y traidora de su clase social, a lo que respondió con las ingeniosas metáforas e ironías que caracterizaron su producción literaria. Otras obras: Sitio a Eros (1980); La batalla de las vírgenes (1933).