A los diez años, Juan Manuel Fangio comenzó a trabajar en un pequeño taller mecánico, donde ayudaba a llevar y traer herramientas, y a los trece se volvió ayudante de mecánico en una agencia de la compañía Studebaker. Entre los quince y los diecisiete años ya era encargado de entregar los coches a los clientes. Se inició en las carreras con un Chevrolet, como copiloto. En octubre de 1936 preparó un taxi prestado (un Ford) para estrenarlo como corredor. Su talento motivó a los habitantes de Balcarce a cooperar en la compra de un Chevrolet de seis cilindros, gesto que Fangio jamás olvidó. En 1940 obtuvo su primera victoria importante en el Gran Premio Internacional del Norte, un recorrido de ida y vuelta de 9.500 kilómetros entre Buenos Aires y Lima, Perú. Fue campeón de Turismo Carretera (la categoría más popular en la Argentina) en 1940 y 1941. Al año siguiente, debido a la Segunda Guerra Mundial, las competencias se suspendieron, y Fangio temía que cuando retornaran ya hubiesen pasado sus mejores años. Sin embargo, cuando desembarcó en Europa en 1949, aún no había llegado su época dorada.
Fangio ganó su primer campeonato mundial a los cuarenta años, en 1951. Luego obtuvo otros cuatro e impuso una marca de cinco títulos mundiales. Participó de 51 grandes premios y ganó 24, otra hazaña sin precedentes. Alcanzó su mejor momento durante la que tal vez haya sido la más emocionante carrera de todos los tiempos: el Gran Premio de Alemania en 1957, el circuito de Nürburbring, de 22,8 kilómetros. Fangio, que estaba 48 segundos atrás de los líderes Mike Hawthorn y Peter Collins, aceleró a fondo con su Maseratti en el trecho final de la carrera, batiendo diez veces el récord de vuelta y superando a Hawthorn en la penúltima. Ganó la carrera y su quinto título mundial.
Tenía tanto prestigio internacional que en 1957 fue secuestrado por las fuerzas guerrilleras de Fidel Castro, cuando se disputaba el Gran Premio de Cuba, con el objetivo de llamar la atención hacia la causa revolucionaria. En julio de 1958 se retiró de las competiciones, a los 47 años. Volvió a la Argentina y ocupó un puesto directivo en Mercedes-Benz. Falleció en julio de 1995, a los 84 años de edad.